lunes, 2 de diciembre de 2013

Cuts ( of hibernation)



REUNIÓN


Primavera. Aún hay heladas. Los abrigos de paño azul alrededor de un árbol. Siempre hay un árbol. Con o sin lechuzas. Falta uno. Ahora ya podemos empezar la reunión. Barbas frígidas se van humedeciendo. Niebla cancerígena. Dedos inquietos en el interior de bolsillos vacíos. Mirar a otra persona es algo inquietante. Decenas de premisas. Inducción. Quiero que te calles. Apagad las pipas. Tú has embarazado a unas cuantas. Ya, ya sé cómo funciona esto. No entiendo por qué tú y ese otro estáis aquí. ¿En primavera caen las hojas? No es una buena mañana. Aunque ahora no existe vuelta atrás. No están ahí bajo ese árbol precisamente por cobardes. La tierra hace a los hombres asesinos. O al revés. Vosotros podéis iros ya. Todo está claro para vosotros. Aquí aún nos queda algo. Algunas aves también emigran en primavera. Tú tienes la sangre muy caliente. Los dedos se abrazan en puños. Algunos lo achacan a una mala crianza. Un desierto. Un desierto de hormigón. Antes fue de hierro. Hierro. Algunos objetos son ideas en sí mismos. Alma mater. Labrar el camino. No exige más velar este árbol. Carvallo. Los abrigos de paño azul planean sobre el vacío. La primavera no es duda. Sólo tu sabes lo que es. El puño entumecido suelta sus dedos frágiles. 


 
REV.

 Cuarenta años de la gran lavadora centrifugando a toda potencia. Cristos clavados en los miembros más íntimos. Generaciones sacadas de una única incubadora. Silencio silencio. Paredes selladas con cráneos tiernos. Amén amén. Sólo hay un camino, éste. Año cero. No existe el pasado. La pureza es lo único verdadero.  Ja! Aunque los dormitorios estén sucios, llenos de sangre. Atrás atrás. Ni se os ocurra. Adelante adelante. Esperar esperar. Al final de todo está la muerte. Sí. Pero hay que saber nacer. Renacer. Vivir vivir. No firméis eso. Es mentira. La memoria se ha perdido. Un nuevo comienzo falso. Ahora qué. Algo ha vuelto pero no lo queréis. La lavadora aún no está rota. Suavizante suavizante. No hay sitio en el tendal. La calle está sucia, llena de sucios. Neófitos. Neófitos jugando a representar el pasado. Falsos. Dejad de limpiar sobre limpio. Hay más de cuatro paredes. Caminan sonriendo. Y vuestro canto está oculto. Habéis olvidado la letra. Dónde está la canción original. Minada. El mundo se está ofreciendo. La tierra. Señales señales. ¿Queréis reconstruir la destrucción? Aquí está. Es la hora. Coged las piezas, están ahí. Las herramientas son fáciles de usar. Indiferencia poderosa. El puño y la razón. Juntos. Juntos. Ellos solos sólo renombran. La verdad no tiene sinónimos. Cogedla cogedla. REV.



 
CUADRO CLÍNICO


Mujer adulta en el diván. Gracias doctor, es cierto. Antes era una chica muy bonita. Ideales. Bueno, ya no me acuerdo. Llevo quince años casada. Por supuesto. El punk ha muerto. El grunge también. ¿Ahora no existe nada? Bueno supongo que hay demasiadas cosas en realidad. La destrucción es necesaria para la construcción. Rev. El día de la final mi marido estuvo toda la noche fuera de casa celebrándolo. Hay que saber leer los periódicos. Quedé sorprendida por su juventud. Sí, satisfecha es un buen adjetivo. El remordimiento no es exclusivo de católicos. Hay muebles que se mimetizan en personas. Idem. Psicoanalizar el vacío. El silencio se presenta como algo difícil. Los tacones al principio me hacían daño. Busco mis herramientas. Demasiada lluvia trae inundaciones. Aún tienes por delante un tramo largo. Una libreta por llenar de garabatos. Hay que vivir de algo. No sufro especialmente por ello. Sí, ya se lo he dicho antes. Antes era una chica muy bonita. Insinúa que ahora no lo soy. Me pone nervioso. Este sofá con aspecto de diván está algo viejo. Todo está muriendo. Relación paciente profesor doctor. Próximas citas. Más café en nuestros blandos vientres. Decir la verdad o conquistarla. Aún tenemos edad. De la nada queda todo por sacar.




ZONA CERO PROGRESANDO


El progreso es una palabra sagrada. Contra ella no se entiende ninguna clase de disputa. Fumata blanca de la ciencia. Que una máquina quita el puesto de trabajo a cientos de trabajadores, progreso, que la superproducción de ciertos alimentos destinados a unos países deja sin otros alimentos a otros países, progreso, que este o ese misil nuevo tiene mayor alcance, puro progreso, los experimentos con animales, progreso, la clonación, las centrales nucleares, todo progreso. No hay de qué preocuparse. Si Fukushima explota no hay de qué preocuparse. El progreso vendrá en ayuda de todos. El progreso construirá un escudo para todos, un techo de cristal empañado de radiación. Pero no traspasará ese cristal no os preocupéis. El progreso creará un escudo anti-misiles y luego otro anti-polución y uno anti-radiación, por supuesto, y todos lo escudos que necesitemos. Y mascarillas de oxígeno incorporadas a nuestros cuerpos y totalmente personalizadas, porque tus pulmones ya no sabrán cómo funcionar. O simplemente no pueden. Pero el progreso no te dará una cura contra el cáncer ni otra contra el sida ni una solución a la autodestrucción. No. Ni dará de comer a todo el mundo, no, ni radicará la pobreza ni mucho menos. Porque el progreso es sólo un arma. Y todos que las armas son ese algo tan peligroso que mejor no tocar. Desgraciadamente todo se olvida. No somos capaces de reconocer ni a un pájaro comiendo una migaja de pan en un parque. Pueden sustituir el agua por algún suero de farmacia, pueden programar tu cerebro, te pondrán un brazo de carbono articulado con una sensible piel de laboratorio adaptable y perfectamente maquillada, todo a su debido precio por su puesto. El progreso es el egoísmo humano llevado a cabo con todas sus consecuencias. Adelante progreso, adelante, guíanos. Tú eres el dueño de la Tierra. La tierra no es nadie. Nosotros tus siervos. Hagamos una gran pira.







lunes, 11 de noviembre de 2013

Credo para mi bisabuelo, de su bastardo bisnieto (de Onetti a O' Nety)




 el peso de tu apellido, de aquí en adelante “nombre” por cuestiones “po po po é ticas” , no sé si tiene algo que ver. si es un nombre que se ha transmitido en la sangre o en el semen desde el primer italiano bautizado o precisamente fue este el motivo original, y no tuvo pila, de esta desdicha. una desdicha en esencia única y exacta .absurda en nacimiento y fondo sí, pero desdicha sin valor para reconocer en la intimidad la duración física de todo. para admitir que sólo hay un camino, el que hubo siempre. una desdicha que no deja de sorprenderme ya que estos días he sabido que no existe tal italiano de por medio, sino más bien un irlandés -hecho por el cuál la historia de la pila puede seguir siendo veraz, aunque el contenido líquido de dicha pila pueda ser bien distinto. el peso de tu nombre entonces ahora me es más entendible porque el Romanticismo Milesiano es otra clase de Romanticismo nada que ver con el Latino, motivo por el que no voy a dejar pasar la oportunidad de expresarlo, me produce otra clase de orgullo. así que esta desdicha transoceánica de ida y vuelta a través de palabras y células tatuadas en brazos y gargantas y pechos, de Santa María a La Ciudad del Sol, espolvoreada sobre genes conquistadores o inmigrantes/emigrantes , esa desdicha, es la que hoy en día puedo reconocer como el peso ancestral de tu nombre. y de tu persona poco clara, Milesiana o Genovesa. Porque como tú bien dijiste, O'Nety no puede ser más que una invención de Onetti.



  



miércoles, 18 de septiembre de 2013

Una tarde en Perlora



                                

 En los últimos tres años no hemos podido compartir más de una tarde. Ella en el embarcadero del Mekong, en un callejón, yo en mi paseo de los Tristes, en el sur en el centro en el este, en el norte. Entramos en una infancia que no hemos compartido, con su diferencia en el tiempo, en el espacio. Pero aún así vivimos juntos una regresión. Una regresión en amarillo y verde.
Y sentimos que un lugar destinado para las vacaciones de trabajadores con pocos recursos tiene algo de mágico a pesar del estilo americano años cincuenta predominando sobre los hórreos.
Nos sentamos en el bar. Que está por encima de la playa en una especie de acantilado domesticado. Me enseña un libro de George Orwell en Catalonia durante la Guerra Civil. Es un regalo de su último amante, Irlandés, que ha dejado en el Sudeste Asiático. Sí, los irlandeses beben tanto como creemos. Tienen un romanticismo especial. Otros un catolicismo especial. Otros como Orwell unas ideas especiales.
El sonido del mar nos lleva esquivando palabras, evitando juicios, sentencias. Hay espacios y momentos que dibujan una sincera distancia. En la que el amor se hace frío para algunos aunque sincero y respetuoso para otros. Sorprendentemente el sol del Norte se hace presente en nuestros cuerpos. Dejamos las botellas de cervezas vacías y bajamos a la arena. Desvestidos. A pesar del frío del Cantábrico que te hace creer que romperá tus huesos nos atrevemos a bañarnos en él. Porque atreverse es una cuestión.  Y al rato, la única opción. 





Para Cova, Julio de 2013, al Norte. 

jueves, 15 de agosto de 2013

At the cut






No se oye ningún despertador. Para despertarse a las 14:00 horas no hace falta. Gira sobre su cuerpo y estira los brazos hacia los reposabrazos de la silla de ruedas que está pegada al lado derecho de la cama. En el aire coloca su cuerpo mientras se gira para encajar sus glúteos en la silla mientras esquiva los reposapies. Cuando está sentado los cierra. Hace rodar las ruedas sintiendo sus brazos después de unas doce horas de sueño. Va al lavabo y se echa un poco de agua en la cara. Después se dirige al ascensor que está al otro lado de su habitación. En la planta baja aparca en el comedor. Enciende la tele sólo para asegurarse que no ha ocurrido otro 11-S y la vuelve a apagar. Coge su guitarra. La guitarra que tiene en el salón. Tocando no olvida que tres de sus dedos de la mano derecha no pueden abrirse y rasgar las cuerdas. Aunque le baste con dos. Sus rodillas se golpean una y otra vez dentro de la silla mientras toca. Dentro de esa silla hay más movimiento que en muchas personas enteras. Su cuerpo se revuelve. Grita y habla. Canta. Aunque el dolor no se vaya. Ni las facturas de los hospitales que ascienden a unos 70.000 dólares. Es 25 de Diciembre y Jesucristo no ha vuelto con ningún regalo.  Suelta la guitarra y se va al porche trasero. Allí coge otra guitarra. La guitarra del porche trasero. Y canta a la sombra sobre la madera americana. Lejos de las miradas de la gente en el porche delantero. Y así todo lo que tiene que decir se  dice. Dos horas después está en el hospital en coma por una dosis letal de relajantes musculares. Y al cabo de otras horas ya no habrá más preocupación por las facturas médicas. Sólo quedó una: “Decídselo a Kristin”.














martes, 6 de agosto de 2013

La Pathos Andaluza.


 La jondura del andaluz traspasa los siglos. Traspasa los campos. Verdes, blancos. Las máquinas que zarandean los olivos, las cosechadoras. Traspasa las tabernas, la suciedad. Europa, el Oriente. La jondura del andaluz es nuestro canto. La libertad. Ese misterio primitivo. Balbuceo de nuestra tierra. Tierra de jilgueros y lobos. De un grito silencioso más profundo que la seguidilla incluso. La gran y última expresión de la pathos andaluza. La que baña los ríos y los rostros del andaluz.
El progreso productivo no entiende de lenguajes prehistóricos. Los nuevos caciques que nunca se han ido no entienden de necesidades ni inflexiones. Nuestro canto y nuestra habla es una misma cosa. Un mismo corazón infinito de ruidos.

 Somos un pueblo triste, un pueblo estático. Dijo ya Lorca en 1922. ¿Y qué ha cambiado en nuestro pueblo?. La piel algo menos quemada por el sol. Menos curtida. Algo menos acalorado gracias al A/A. Pero nuestras espaldas siguen soportando el mismo peso. El peso del amor. De la muerte. En busca de esa señal salvadora en nuestros cielos. En la sierra. En la costa del Mediterráneo. Qué fonemas usar para expresar eso. Qué oscuridad salvar bajo la sombra de Despeñaperros. Somos el oriente hispánico. La gravedad de la psique castellana. Nada de medias tintas. O el pozo ciego o la luz. O la Pena. O tus besos. Siempre la noche realmente. Estrellas encerradas en un silo de vaguedad. Al cual no se entra con gramáticas. “flotando en el viento como vilanos de oro” . ¡Qué espíritu el nuestro! Lleno de llantos. De Poesía. De Sangre. Una sangre hervida bajo el sol. En los campos. En los invernaderos. En el hormigón de agosto. Ahora desierto de nuevo. Elegía del capital.

 Estamos destinados al infinito. El patetismo andaluz perdurará. No será borrada esta pasión. No cabe destrucción. Eso sería la resolución. El infinito plasmado. Nuestros ritos pueden ser entendidos o criticados. Incluso por nosotros mismos, hermanos. Hombres que rechazan la sencillez y a los hombres extraños. Nacidos bajo el mismo sol. Aunque no todos martirizados por él. Represores de la raza. Que no oyen ni poseen el grito. El grito eterno del andaluz. Bajo la noche.





* Texto inspirado en la conferencia en el Centro Artístico y Literario de Granada el 19 de Febrero de 1922 de Federico García Lorca.