martes, 22 de abril de 2014

Los extraños


Gente que se mira, que un día fue y hoy no es. Algo. Nada. Que no se miran. Ahora. Que se vacían y se llenan, a solas, a diario. El uno sin el otro. Algún mensaje. Alguna pieza de algo adornada con restos de sentimientos. Fingida educación. Emails fantasmas. Móviles martillos. Rostros perdidos. Calles separadas y desconocidas. Sin roces de brazos. Ni miradas cómplices. Sólo extrañeza. Como rostros que se cruzan en una siesta. En un círculo con esquinas. Rasgadas entrañas que no se saludan. La rabia deja de ser suplemento alimenticio. El aire es suficiente. El vacío lo es todo. El vacío que es uno. El lleno.  







No hay comentarios:

Publicar un comentario