jueves, 10 de noviembre de 2016

Narciso denostado y entripado

Oh créete
deformado

oh alábate
asustado

oh mírate
asolado


tu búsqueda absorta y eterna
de la gloria de tu mediocridad
acomplejada y enferma


Oh piénsate
anulado

oh sedúcete
rechazado

oh contémplate
trastornado


¿buscas aún a la que te dio aliento?
perseguido y perseguidor
apartado de



Oh sábete
no admirado

oh ínflate
oculto

oh escúchate
vacío


arriesgando la nada frente a la vida
náufrago de la notoriedad a causa
de la falta de talento



Oh fantasea
hundido

oh búscate
incapacitado


oh créete
derrotado

en tu sucio hálito
infectado por la importancia de la carencia
en el salón de los ilustres elegidos








miércoles, 26 de octubre de 2016

El enfermo



 El enfermo ha vuelto. Agonizando. Aprovechando la compasión y la fe de los que reconocen la enfermedad. No os acerquéis, dejad a los enfermos morid a su manera. Ya están muertos. Su obesidad mental, su esquizofrenia, su sangre...su final está escrito. Dejad que se maltrate así mismo. Nunca ha luchado. Ha abrazado la enfermedad porque era la única que le reconocía en su soledad, en su abandono. En su trastorno y su suciedad. No dejéis que se acerque. Moviéndose en las redes como el virus que lleva dentro y en el que se ha convertido. Intentando acercarse a mujeres con su desesperación maternal, con su peculiar juego seductor de psicópata diseñado para psicópatas.  Buscando el reconocimiento de los otros agentes de la enfermedad. Con su absurdo ego de castellano acabado intentando controlarte.  Al principio creerás que es amable, que es educado. Te hará regalos. Luego empezará a invadirte. Intentará entrar en tu casa. Intentará escupir sobre tu sangre. Intentará que renuncies a ti. Que trabajes para él. Pero él no pertenece a la misma clase que tú. Él nació infectado y se ha extendido. Por todo su cuerpo. Lleno de malformaciones guiadas por el complejo. Intentará contagiarte. Él que ha sufrido tanto. Al que todos persiguen para matar. Dejadlo morir solo. Porque ya está muerto. Dejadlo disfrutar su herencia. Esa a la que nunca abandonará. Como a su enfermedad. Todo en él es vacío. Todo en él es miedo. Todo en él es odio. Buscando la brecha de la revolución como excusa para contagiaros. Y a los que osen luchar contra él aniquilar. Ejecutaros. Su arquetipo incrustado y enfermo.Pero para él es demasiado tarde. No llegará a los fusilamientos. Él esta muerto. Su estado terminal avanza. Como las voces y las miradas por las estanterías de su casa. Alejaos de él. Os acusará de agentes de lo mísero, del engaño. Él no tiene cura. Él esta muerto. La enfermedad es su vida. Él esta muerto.  




domingo, 28 de agosto de 2016

Una mañana


Una mañana miré al Sol directamente. Mis ojos se cegaron. Una costra dura e ingrata cubrió mis ojos. Durante algunos años este fue mi rostro. Un rostro duro e inerte. Una mañana miré al Sol directamente. La costra de mis ojos se deshizo. Y ya no estaba enfermo de dialéctica. Y ya no estaba enfermo de fonética. Habitaba en el silencioso vacío de la nada, la nada llena de comienzo y fin. Con mi cuerpo recitando pausa. Mis ojos se abrieron para sonreír sólo a los animales que sabían que lo eran. Para no mirar la no vida. Del enfermo vivo. Del enfermo muerto. Mis ojos se abrieron y os vieron. Caminar entre vosotros, rodeados. Y ahora miro al Sol directamente. Destruyéndome. Alimentándome. Directamente.  












martes, 23 de agosto de 2016

Zambujeira Do Mar, Agosto 2016.

Al tercer porro tengo la convicción estúpida y tardía de que no llegaré a nada en el mundo de la literatura sino soy capaz de escribir más de diez minutos seguidos. En todos estos años ni siquiera he terminado un capítulo de todas las novelas que empecé. El impulso con el que escribo un poema es inútil ante la idea de una novela. El pase al Olimpo de los escritores. El ser recordado es el invento del hombre para creer que puede vencer a la naturaleza. Después de esta novela me ganaré el derecho. Después de muerto me recordarán. Incluso ganaré más dinero muerto que vivo. Pero para ello tengo que desarrollar una voluntad de la que carezco. O vencer un miedo desconocido. Habrá que corregir, reescribir, revisar, pulir...cuántas cosas tendré que hacer. A cuántas cosas renunciar o vencer. Destruir mi cabeza, destruir mis dedos. Convertirme en un ente no corpóreo. Y escribir, escribir. Escribir cientos de hojas. Quizás 800, 1000 páginas con un aire a revuelo clásico disfrazado de no se qué. Seguramente hablaré de cine, y usaré estúpidos símiles. Sobre mujeres, compañeras y salvadoras. Enfermos de la razón que encontré por diferentes caminos de cuales y quienes huí. Enfermos de tanta alienación de los que también huí. De la opresión y lo opresivo. Del control de natalidad. De los espíritus muertos que aparecen y de los que nunca vuelven. Del amor y de la muerte. De la revolución y la nada. De aquellos que me hicieron. De aquello que me ha creado y moldeado. De la violencia y los carteles inmobiliarios. Del pueblo y la ciudad. De carreteras y kilómetros, solo y vigilado. De los rezos y los golpes. De los que quemaría sus libros (y a ellos). Vargas Llosa, Savater, Sanchez Dragó, el académico reportero Arturo Pérez Reverte. De lo silencioso, y los valientes. De las bombas del imperialismo. Del muro de la intelectualidad. De la necesidad como virtud revolucionaria. De las batallas perdidas. De los que nunca ganaremos. Del paraíso explosionado. De la búsqueda de agua por el desierto, entre huesos y carroña. De la inteligencia artificial y la estupidez y la muerte y la desdicha. 800, 1000 páginas de todo y nada. De mi y de vosotros. De generaciones muertas y vivas. La elipsis y el bucle del universo. De la muerte del Sol y el último oso. Una novela, sólo una novela.







jueves, 28 de julio de 2016

Walden

Hablé por teléfono con Walden y estuvimos de acuerdo en 
que la melaza es un buen sustitutivo
pero no sólo hablamos de alimentos
le hice hablar de profecías ancestrales y le pedí
que me liberara de este yugo y de todos los yugos que posan sobre mí 
perfeccionados con el tiempo y algunas conversaciones 
todos esos yugos blancos de algodón e incluso
del yugo de hilos rojos que permanece dentro y más allá de mi y este continente.
Él habló sobre la posibilidad de que para el  invierno tengamos nuevo presidente
y de alguna manera de nuevo los pseudos y los pobres vuelvan a pasar el trapo
por encima del cristal y no noten las manchas incrustadas por la gran distribuidora
sobre el que tragamos nuestros antibióticos y nuestras faltas.
¡Oh Walden! Dame un pequeño desvelo del misterio eterno color tierra
sin abstenerme a un gran vómito
¡Oh Walden! Libérame de esta ciudad de ira
y no me dejes ser uno más de sus hijos
hijos de la ira
con un canto oscuro a contraluz
¡Oh Walden! ¿Pondrás faroles en el camino?
¡Oh Walden! ¿Dónde estás Walden?
¿Has colgado Walden?


M.Onetti 





Poema del libro "Sol eléctrico amarillo". 2016

Edición digital editorial Groenlandia
Edición en papel editorial Baile del Sol (en edición) 

martes, 7 de junio de 2016

El mito del amor y el miedo.


Todo vuestro amor es miedo. Una imagen del miedo. La cabeza de Sylvia Plath en el horno, el cuerpo de Alejandra Pizarnik , el espíritu de Alfonsina Storni. El lado doloroso del nosotros. Alejado de la calurosa distancia del amor. Del equilibro y la fortaleza del reconocimiento. Devastadora la vida, que es vida y muerte, sólo muerte. Y qué pena bañarla del pensamiento de amor y no de AMOR. Devastadora la lucha por significarnos cuando el todo está ahí. La plenitud de la conciencia compartida, originaria y olvidada. Distorsión ancestral soportada. Y seguimos, seguimos por una senda que es lucha entre el “amor” y el “nihilismo”; o el CINISMO, más bien. Y todo es miedo. Vuestro colon destruido por la disonancia contemporánea heredada que osa cubriros con su telaraña. La que arranco día a día, como un mito griego, reconstruyéndose así misma en mis órganos.






  

viernes, 20 de mayo de 2016

Gusanos

Hay gusanos por todas partes. Hay gusanos por todas partes carcomiendo la esperanza que aguardamos. Saboreando la espera. Saciándose con la evocación del cuerpo del perdedor. De nuestros cuerpos de pobres. Lamiendo nuestros raquíticos espíritus. Marginados y ocultos. Anémicos y amnésicos. Hay gusanos por todas partes. Amigables gusanos portadores de lo enfermo y el rechazo. Hambrientos de la razón muerta. Suaves opresivos, invasivos de lo libre. Ansiosos por erigirse en nuestra desaparición. Devoradores de lo que aún palpita. Hay gusanos por todas partes. Gusanos que acaparan cualquier agujero de huída. Gusanos que emergen de lo muerto a lo muerto.




jueves, 14 de abril de 2016

Obesidad mental


La obesidad mental bloquea cualquier aliento de movimiento, de acción. Anula los sentidos y la capacidad sensorial de estos en pro del principio del miedo por el que están atrapados y escondidos tras el personaje alimentario en el que te ha convertido. Consumidor de las entrañas contra las que te eriges y con las que sacias tus complejos y tu ansia bajo tu tejido mental y carnal. Ensanchando tu miedo y el polvo pegajoso que recorre tu cuerpo y todo lo que tocas. Ese polvo grasiento de injurias y escarnios, representación de tu apetito voraz por ser, de tu apetito insaciable de, de la representación de una disonancia mórbida y voraz que recrea una y otra vez su propio menú, cambiando de comensales según tu rancio mecanismo mental acepta o rechaza las reservas de los individuos conscientes del cólico profundo en el que te ha sumido tu obesidad mental.



Ilustración Steve Cutts. 

lunes, 4 de abril de 2016

El púlpito


 ...Aquellos que aspiran con ansias al púlpito con la idealización de su ideologización de la expresión de su enferma conciencia a través de sus extremidades desfiguradas por la palabra y la elevación de la objetividad de su lenguaje y perturbado intelecto, temerosos frente a la pureza de la tierra y abocados a la verdadera raíz de su herencia privilegiada y acomplejada frente a la violencia salvaje natural del hombre que rechaza los púlpitos y los axiomas de la intelectualidad cobarde y autoritaria que intenta dominar la vida y el talento despreocupado del animal y el universo que habita en, con su eterno y múltiple soliloquio disfrazado de, con el único propósito de la ascensión de su cuantiosa prepotencia temerosa de la libertad y la muerte...





jueves, 10 de marzo de 2016

El secreto del Sol

Compartimos el secreto del Sol
el de la espalda doblada
las manos agrietadas

compartimos el secreto del Sol
el de la cabeza baja
los ojos encogidos

compartimos el secreto del Sol
el de la vida y la condena
el de los pies castigados

compartimos el secreto del Sol
el del camino del silencio
la invisibilidad de



compartimos el secreto del Sol
el del pecho frío
la garganta que arde

compartimos el secreto del Sol
el sueño de ojos abiertos
la vereda de la rabia

compartimos el secreto del Sol
el del estómago hambriento
el del vómito irritado

compartimos el secreto del Sol
el fuego callado
la pobreza de



compartimos el secreto del Sol
nuestra oscura raíz
de células calcinadas

compartimos el secreto del Sol
el lenguaje alejado
de cualquier otro secreto

compartimos el secreto del Sol
materia y verdad
herencia y lucha

compartimos el secreto del Sol
el de la ausencia de lluvia
el del lenguaje de







domingo, 6 de marzo de 2016

Con mi pecho roto.

Con mi pecho roto
he abierto

con mi pecho roto
he recibido

con mi pecho roto
he esperado

con mi pecho roto
he clamado

con mi pecho roto
he abierto

con mi pecho roto
te rechazo

con mi pecho roto
te ahuyento

con mi pecho roto
te alejo

con mi pecho roto
te destruyo




sábado, 5 de marzo de 2016

La tierra se ha llenado de palomas muertas
ensangrentadas con la gracia irónica del adiós
el adiós de los falsos duelos
de falsas banderas

con la solemne destrucción
de un canto de despedida
sin vuelo y sin verdad

sólo palomas muertas
alimento de la falacia
presente del último

sólo palomas muertas
esperándonos con ramas arrancadas







  


sábado, 13 de febrero de 2016

Declaro


Hago una declaración: 

 mi único propósito es elevar mi espíritu sobre vuestro ego alimentado de razón. Destruir vuestras armas de ciencia y lenguaje. Dejar que os consumáis en la enfermedad. Mi único sonido es el estallido de este corazón.  






lunes, 25 de enero de 2016

El anhelo de la más pura expresión de emoción.

La más pura expresión de emoción es la ausencia de palabra. La muerte del lenguaje. De la humanidad. No razón, no ideología. La más pura expresión de emoción es un ahogo animal aplastado, oculto entre tu sucio ego. Sólo en el instante de la muerte, de tu muerte, verás esto. Verás el animal que eres desde el principio y el final. Y sentirás la más pura expresión de emoción. Aquella que estas palabras enfermas y contaminadas a causa de vuestra inteligencia y vuestros arquetipos no pueden sentir, sólo anhelar.